La posición en la cancha. Cómo posicionarnos correctamente.

Seguramente te ha pasado muchas veces de quedar mal posicionado en la cancha o de pegarle mal a la pelota y no saber por qué. Muchos errores se solucionan estando siempre en el lugar correcto y aprender a hacerlo te dará enormes beneficios. Hoy desarrollaremos esto en profundidad.

“Si quieres tener posibilidades contra él (Nadal) en polvo de ladrillo, debes estar bien posicionado en la cancha en todo momento” Jannik Sinner

La posición en la cancha

Tu posición en la cancha es importantísima en todo momento. Debe ser un aspecto de tu juego al que le prestes bastante atención. Estando siempre bien posicionado, ganarás puntos más fácilmente y le pegarás mejor a la pelota. Por otro lado, si no estás en el lugar adecuado, todo te costará más. Pero, para no complicar las cosas (siempre buscando simplificar) vamos a evaluar de qué depende tu posición, porque, claro está, no tienes que estar siempre en el mismo lugar.

Primero y principal depende del rival y de la pelota que venga. Depende de tus circunstancias y de tu juego. Y depende, por supuesto, de tus posibilidades físicas. Vamos a evaluar una por una.

Lectura del rival

Está claro que una de las cosas más importantes a tener en cuenta para ajustar tu posición en la cancha es leer y estar atento a lo que hará el rival. Pasa mucho en principiantes que se mueven poco después de pegar y se quedan muchas veces en el mismo lugar. Cuando juegas una pelota profunda y buena, por ejemplo, y ves que tu rival la devolverá con dificultades, debes ir adelantándote un poco porque seguramente se quedará corto y, en ese caso, estarás mejor preparado. Si te quedas en el fondo, cuando se quede corto ya será muy tarde y llegarás exigido. Tu buena profundidad no habrá servido de nada.

Por otro lado, si lo ves a tu rival cambiar de empuñadura o cambiar la forma de pegar para tirar un drop, debes estar muy atento y también adelantarte un poco. Todos estos ajustes los irás corrigiendo y perfeccionando con el tiempo, pero debes hacer ese esfuerzo consciente por mejorar este aspecto y tratar de ver dónde te conviene estar parado.

Cuándo ir a volear

No es fácil darse cuenta en qué momento nos conviene subir a la red y no subir a tiempo es un error que cometen muchos principiantes (y nivel intermedio también). Por supuesto que hay que mejorar la volea antes de animarse a subir, pero quizás la relación puede ser inversa y no voleas bien porque no te animas a subir. Subiendo y aprendiendo cuándo debes hacerlo mejorarás implícitamente tu volea.

Bien, todo muy lindo, pero ¿cuándo debo subir?

• Cuando estoy cerca de la red: es obvio que si pegas una pelota corta y ya estás demasiado cerca de la red, de nada te servirá pegar y volver para atrás, ya que quedarás en una muy mala posición.

• Cuando ves que tu rival llega exigido: Esto es lo más importante a tener en cuenta. Debes prestar mucha atención a tu rival y subir automáticamente cuando veas que va a jugar un slice exigido o que va a llegar con la punta de la raqueta. Es obvio que su pelota irá corta y (aunque no te tengas confianza con la volea) podrás volearla sin problemas al otro lado.

• Cuando tu pelota es muy buena y estás en una buena posición: ni bien ves que golpeas un tiro muy bueno y estás dentro de la cancha, debes subir a la red sin dudar.

• Situaciones variadas: Existen muchas situaciones en las que puedes subir y poco a poco te irás dando cuenta de cuándo sí puedes y cuándo no. Si comprendes y practicas las 3 que mencioné ya es un gran avance y mejorará tu juego. Serás un jugador más completo.

Correr para los costados

Correr hacia los lados es algo que a todos nos cuesta y es el motivo de muchos errores. Resulta normal llegar mal parado y esto se debe a varios factores, pero voy a nombrar los 2 principales.

• No tener claro a dónde la jugamos.

Muchas veces corremos solo pensando en cómo llegar sin saber dónde la debemos jugar. Es primordial que primero decidamos dónde jugarla y luego cómo hacerlo. Si esto no sucede así, no tendrás claro el objetivo de tu técnica y te aseguro que fallarás el golpe.

• No llegar hasta detrás de la pelota.

Este concepto puede ser medio confuso para explicar en texto, sin embargo, es muy útil que corras rápido para llegar a ponerte detrás de donde la vas a jugar. Si la pelota te queda al costado, no podrás pegarle cómodamente y fallarás seguido el golpe.

Tener en cuenta tus posibilidades

Por supuesto que tu movilidad en cancha debe tener en cuenta tu físico. Si no estás en condiciones para salir para atrás en cada pelota larga, te convendrá quedarte en la línea y pegar de sobre pique a esas pelotas. En este caso también podrás ir un poco más seguido a la red para cerrar los puntos más rápido.

Si este no es tu caso y tu físico es impecable, aprovéchalo al máximo y desplázate con inteligencia.

Conclusiones

Saber moverse en la cancha es de lo más difícil a desarrollar, pero también de lo más importante. Saber dónde pararse de acuerdo a cómo le esté pegando nuestro rival es entender un poco más el juego y te recomiendo comenzar a practicarlo cuanto antes.